Esta es una receta de aprovechamiento muy fácil de hacer y muy rica. Con esos plátanos que ya están demasiado maduros, y suelen acabar en la basura, podemos hacer este magnífico bizcocho.
Ingredientes
(Todos a temperatura ambiente, salvo que se indique
lo contrario)
- 1 cucharadita de extracto puro de vainilla
- 260 g de harina de trigo normal
Elaboración
Pela los plátanos y tritura la pulpa (con un tenedor). Reserva.
En un cuenco
mediano, tamiza juntos los ingredientes secos: harina, canela, levadura,
bicarbonato y sal.
En otro cuenco grande
bate los huevos con el azúcar hasta obtener una mezcla que blanquee y sea
esponjosa. (Si tienes amasadora con la pala genial, y si no con una varilla eléctrica)
Sin dejar de remover,
incorpora el buttermilk y el extracto de vainilla hasta que quede
todo bien combinado.
Déjalo enfriar sobre una rejilla dentro del molde durante 10 minutos. Pasado este tiempo, desmolda y deja enfriar por completo sobre la rejilla.
Se conserva muy bien tapado a temperatura ambiente.
Notas
- Cuanto más
madura esté la fruta, mucho mejor.
- Si aguantas varios días sin consumirlo y ha quedado un poco seco, puedes
tostarlo a rebanadas en la tostadora. También está delicioso untado con un poco
de mantequilla.
- Se
puede congelar, yo lo he probado y queda casi igual, aunque nada como recién
hecho, claro.
- Solamente
tenía dos plátanos, así que lo que hice fue calcular el peso de uno y añadir
ese peso de compota de manzana que también tenía por ahí.
Fuente: Pemberley Cup & Cakes by Rosa